Presionar la rígida tecla con el símbolo del triángulo, hasta que el carrete del casete comenzara a girar; escuchar el extraño ruido—similar a un láser de película de ciencia ficción—que hacía girar el mecanismo del disco compacto, para desplegar en una pantalla monocromática, el número de canción; o, para los que tuvimos la suerte de convivir entre la era análoga y digital, el placer gustoso de dejar caer la ajuga del tocadiscos en ese brilloso disco de vinil, mientras escuchabas el clic que hacían los botones del ecualizador, para después abandonarte a leer las letras de las canciones, desplegando el “acordeón” impreso, adjunto a las cajas de los casetes y los cd’s—en su caso—y leer con detenimiento los nombres de los autores de las canciones en las contraportadas (muchas de ellas dignas de ser enmarcadas) de los empaques de los LP’s, mientras los acordes de la música te trasladaban a otro universo.
Hoy, todo eso está prácticamente extinto. Esa tecnología en su conjunto, ha sido arrasada por un pequeño botón (verde, rojo, rosa o azul) en el teléfono inteligente, tableta, “Smart tv” o computadora de su preferencia. Las apps de musica, con gigantescos catálogos musicales, ofrecen un sin fin de posibilidades sonoras para descubrir o repasar géneros y artistas diversos. Sin embargo su aparición, también a supuesto cambios radicales en la manera en la que consumimos musica para el disfrute.
Aquella excitante travesía a la tienda de discos, en donde uno despilfarraba sus ahorros para comprar el ultimo disco de su banda o artista favorito, ha sido desplazado por los “reel’s” o cortos que inundan nuestros dispositivos electrónicos (gracias a la perspicaz pero permanente escucha de los micrófonos de nuestros aparatos) que sugieren escuchar o “bajar” la última canción de tal o cual artista. La tarea casi técnica, de poder «ecualízar» el sonido de las melodías, ha quedado a merced del tipo de plan o suscripción que elijas.
Conocí y descubrí muchas bandas a través de la recomendación directa de la voz de mis amigos, previo a una “sesuda” y profunda explicación sobre las influencias londinenses, o del grunge en la banda recomendada. En repetidas ocasiones me perdí leyendo menudas entrevistas del grupo del momento (sí, en un artefacto antiguo llamado revista impresa); hoy, las aplicaciones de música sustituyen esa curiosidad por un código de programación denominado “tus me gustan” (ignoro como es mío el algoritmo y menos aún, como sabes mis gustos), un personalizado “creado para Pito Pérez”, no sin antes desplegar el arrogante “recomendadas para Pito Pérez”.
Mientras reflexionaba sobre esta aberración, di “play” a una lista de reproducción creada por mí y me aventure a presionar el botón “mixear”; todos los acordes que sonaron durante los primeros minutos se mezclaron de manera adecuada. Sonó música de Caifanes, Pink Floyd, Café Tacuba, Los Tres, Artic Monkeys, Pearl Jam, Metálica, Radiohead y hasta de David Bowie, cuando de repente, después de la última estrofa de la gloriosa Rebel Rebel, escuche unos acordes acompañados de guitarra acústica, una voz ahogada, con una canción que hacia alusión a rayar al astro rey, de un grupo tapatío llamado Maná.
Despues de verificar que mi oído no estuviera sangrando, musite para mis adentros: “Bienvenido a la jungla”[i] del algoritmo. Al escuchar las notas musicales de esa banda (también llamada Sombrero Verde) comencé a sentir cierta “paranoia androide”[ii] y procedí a cuestionarme si estaba “sobrio”[iii]. Ante el presunto “sabotaje”[iv] de las canciones que me sugería tocar la nórdica aplicación, pedí a mis “lentas manos[v]” que pulsaran el botón de avanzar para “ser libre[vi]”. Una vez habiendo librado el “obstáculo 1[vii]”, cruzando al “otro lado[viii]” de esos infames acordes jalisquillosDenissedeKalafescos, pensé en “hacer explorar el mundo exterior[ix]” de una forma “muy maniaco de mi parte[x]” y poder recobrar la “cordura[xi]” de “cuando éramos jóvenes[xii]”.
“Sentado junto al océano[xiii]” y sintiéndome “una vez[xiv]” como un “titiritero[xv]”, procedi a encender mi “pipa de hachis[xvi]” y como un apache “cochise[xvii]”, me perdi en la sabana musical del rock para recobrar “eternamente[xviii]” ese “zumbido de amor[xix]” que solo se obtiene estando en los “puntos cardinales[xx]” de un “asteroide[xxi]”, escuchando “el gran concierto en el cielo[xxii]”.
[i] https://open.spotify.com/intl-es/track/0G21yYKMZoHa30cYVi1iA8?si=0de7013a76bb4b29
[ii] https://open.spotify.com/intl-es/track/6LgJvl0Xdtc73RJ1mmpotq?si=c50caa66ab804db8
[iii] https://open.spotify.com/intl-es/track/6DyywdbmTzlmXBzG9ym7Rt?si=63d365f138f34043
[iv] https://open.spotify.com/intl-es/track/0Puj4YlTm6xNzDDADXHMI9?si=56b09c018d264471
[v] https://open.spotify.com/intl-es/track/1VcIbyyDX8j0GNxSlsRFeJ?si=9932017f58f84fce
[vi] https://open.spotify.com/intl-es/track/1JcGNoiwifg0MdJMVgJQYx?si=8dc09809de744a3e
[vii] https://open.spotify.com/intl-es/track/1ZBqJilDGBVYktvlCEo9jC?si=397ddf6958a04770
[viii] https://open.spotify.com/intl-es/track/64BbK9SFKH2jk86U3dGj2P?si=381c85b5d6a94de7
[ix] https://open.spotify.com/intl-es/track/5TLA7O0ogTqwZHbS3ERabw?si=ba3de4372dd54c4e
[x] https://open.spotify.com/intl-es/track/0MULbk6JroKmnLPRwpj4m2?si=55b00f6c8d984956
[xi] https://open.spotify.com/intl-es/track/5F6rwEF15hN1jnhNk2YQHn?si=228ee1dffddc4d08
[xii] https://open.spotify.com/intl-es/track/70wYA8oYHoMzhRRkARoMhU?si=0e271df1324d49f6
[xiii] https://open.spotify.com/intl-es/track/1D3YGmST01Ba0WRiT7THPG?si=3029b4596ae145be
[xiv] https://open.spotify.com/intl-es/track/4nRyBgsqXEP2oPfzaMeZr7?si=2286287325504288
[xv] https://open.spotify.com/intl-es/track/2MuWTIM3b0YEAskbeeFE1i?si=49495eb9ec01422f
[xvi] https://open.spotify.com/intl-es/track/2mPMFJvQ0v27gVqe5b6nDn?si=941a2385efab482e
[xvii] https://open.spotify.com/intl-es/track/4OCzAGgyWsUKpdWufYywZm?si=3f04b1a4a3d54657
[xviii] https://open.spotify.com/intl-es/track/5UWwZ5lm5PKu6eKsHAGxOk?si=a816fe328a4c4e01
[xix] https://open.spotify.com/intl-es/track/5muVpPu8Fj9fXfDbbqDdrZ?si=8418fc85d4d04a6a
[xx] https://open.spotify.com/intl-es/track/5xz7PKE2IhNmezq5eUVSSM?si=e7da1a3aee7d4eb7
[xxi] https://open.spotify.com/intl-es/track/3GiR4PjHhndEYydE4ZvyOT?si=c46cb194505844e2
[xxii] https://open.spotify.com/intl-es/track/2TjdnqlpwOjhijHCwHCP2d?si=2c0c0045bec44eb7

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